Viernes 23 de Septiembre de  2011

EL CUMPLEAÑOS DE LA PRECIOSA.

Hoy me levanté pensando en el cumpleaños de mi mami pechocha, procurando no hacer ruidos me fui a la sala a buscar la grabadora para ponerle las mañanitas,  mientras  mami todavía dormía tranquilamente. Ya en la puerta principal de la casa pude ver dos sombras: una grande, una chiquita. Pensé en Pita o tal vez Paco y la pedorra de Dulce. Era Pita y Dulce tratando de abrir la puerta sin hacer ruido, quizá le costaba abrirla ja ja. Abrí la puerta eran ellas además de Vero con grabadora en mano (otra). Probamos el disco de las mañanitas –báaajjaaalleee- dijo Vero con histeria y  miedo que se hiciera un gran ruido y arruinara la sorpresa. Vero decía que pusiéramos la grabadora en la alacena de la cocina, pero yo con toda la autoridad que me autorizo dije que el lugar era en el tocador del cuarto, cerca de la cama donde mami aún dormía….estás son las mañanitas que cantaba el rey David… Despertó Charo y  despertó mi madre ¿qué jué? ¿Qué pasó?. Cantamos, eramos el coro de Pedro Infante, besos, abrazos. Vero acurrucada con mi mamá, Dulce al lado y  Charo haciendo mutis volvió a dormirse.

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LA HISTORIA QUE VOY A CONTAR EMPIEZA UNA NOCHE CUANDO LA POLICIA VIOLÓ LA CONSTITUCIÓN.

Hoy estoy leyendo “Dos crímenes” de  Jorge Ibarguengoitia. La historia de Marcos y la Chamuca. Lo que Marcos  piensa y dice al saber de lo ocurrió en su casa: “la policía es capaz, cuando le conviene, de colgarle cualquier delito a quien sea”  está muy a tono con el atropello del ejército en varias casas de Cunduacán, incluida las del Presidente municipal  esto ocurrido  hace dos días.

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Otra vez, el cielo azul cobalto.