Esta mañana de domingo leyendo diarios (Josep Pla, Virginia Woolf, André Gide). Me detiene A. Gide en París, 12 de marzo de 1938... Creo que ha leído mi cuenta de facebook y le ha hecho escribir esto:
París, 12 de marzo 1938
Esta despreciable comedia que representamos todos en menor o mayor medida; a la que desearía prestarme menos que tantos otros, de manera que mis escritos hallaran en esta misma negativa su valor principal.
Reaparece a cada paso la preocupación que tenemos por nuestro rostro, por nuestro personaje. Estamos representando y nos ocupamos muchas veces más en exhibirnos que en vivir. Quien se siente observado se observa. Hay, sin embargo, quienes están constantemente atormentados por el afán de presentar de sí mismos una imágen más auténtica, más de acuerdo con su íntima realidad. Hay otros que hacen un gran esfuerzo para que se les tome por lo que se muestran, pero que no se muestran como lo que realmente son. ¿Hipócritas? No del todo.
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Tengo el domingo y el lunes, completos para disfrutar...
